11 de marzo
Estamos en un momento donde el planeta y la humanidad están viviendo situaciones donde el corazón y el alma están sufriendo, están palpitando y el planeta está viviendo esta situación. Quiere decir que lo que está pasando en el tsunami, afuera es que adentro de la tierra, el planeta está tratando de soltar, de desprender, de liberar las emociones. Este tsunami está hablando de las emociones. Conéctense con su campo emocional, con lo que ustedes sufren emocionalmente, la tristeza, el abandono, la ansiedad. Aprovechen la energía de este momento. Hoy es un día de sanación. Aunque ustedes vean destrucción, no es lo que parece. Hoy es un día grandioso. Es más, ustedes ven destrucción pero lo que se está soltando son las emociones de este planeta. Es lo que el planeta siente que le están haciendo. El agua representa las emociones y lo que ustedes están viendo es la emoción de su planeta. Escuchen con atención. Entiendan y comprendan que esta destrucción es solamente aparente. Esas almas que en esta liberación se desencarnaron son los seres elegidos para esta misión. Esto muestra a todos los ojos del mundo que el planeta ya no soporta vivir situaciones de represión, de tristeza, de abandono, de dolor, de sufrimiento y todo esto lo están viviendo ustedes, todas estas situaciones, también las viven millones y millones de personas. Cuando días atrás hablaban de lo que está pasando en Egipto y en Libia, que se están liberando las dictaduras, todas estas situaciones están mostrando las emociones. Ya no más represión. Esas muertes que ustedes ven por esas liberaciones también son aparentemente destrucción y no son destrucciones. Se está sanando el planeta. Esto es sanación. Atención. Cambien la cabeza, por favor, cambien el pensamiento. No están viendo destrucción, están viendo una sanación del planeta. Estamos enviando luz, estamos enviando energía, estamos abriendo sus mentes. Aprendan a entender y a comprender. Aprendan a ver más allá del árbol. Aprendan a ver el monte. Empiecen a entender que lo que ustedes están viendo en este momento son las emociones de miles y de millones de personas que están sufriendo situaciones críticas en su vida, de presión, de terror, de dolor, de sufrimiento, de enfermedades y el planeta también lo está sufriendo porque el planeta es parte de ustedes, el planeta tiene vida, respira, tiene conciencia, igual que ustedes. El planeta se está sacudiendo, se está liberando. Esto es una liberación. Para ustedes pueden ver destrucción pero para el planeta es una sanación. Hoy es un día de sanación y aquellos que ya no están y en este momento están en la luz, estos seres están ayudando desde arriba. En este momento hay cientos de miles de almas que desencarnaron para ayudar desde arriba al gran cambio. Abrán más movimientos, más movimientos de tierra. Esto no para. Esto está en pleno auge. Serán sorpresivos. El agua seguirá moviéndose porque las emociones se siguen moviendo y esto no va a parar hasta que sus mentes paren, hasta que su mente cambie. La humanidad tiene que empezar a pensar en amor, no en destrucción, no en bombardear, no en matar, sino en crear vida, vida. Esto que está pasando hoy para el planeta es una renovación. El planeta se está renovando, los latidos del corazón de nuestro planeta están empezando a sentirse. Dice que el terremoto es como palpitaciones del planeta. El corazón del planeta late y los terremotos representan como palpitaciones y las palpitaciones pueden llevar a un infarto del planeta. Puede infartar. ¿saben lo qué pasa cuando alguien infarta? Lo saben ¿verdad? Entonces o hacen un cambio, o cambian su mente, cambian su manera de pensar y empiezan a comprender que la vida es otra cosa, que la vida es amor, que la vida es alegría, si no comprenden esto el planeta seguirá sufriendo grandes palpitaciones hasta su infarto. Es solamente si el planeta infarta, sólo en ese momento tocarán a Uruguay, porque Uruguay representa el corazón del planeta. Por ahora sólo se sienten las palpitaciones. Cuiden el corazón. A todos ustedes les pedimos, envíen luz, envuelvan el planeta, envuélvanlo, llénenlo de luz. Una cadena humana de luz. Visualicen a los desencarnados en este momento. A todos los seres que están arriba, que saben que tienen que proteger el planeta porque no podrán seguir encarnando en este planeta como lo conocieron una vez. Estamos llevando luz a sus mentes. Envuelvan el planeta. La energía, el amor, en este momento está sanando las emociones. Sanen sus propias emociones y expandan esta sanación. Sientan su energía. Sientan amor. Vinieron a aprender el amor. Aprendan a amar. Aprendan a quererse a sí mismos, a respetarse a sí mismos. Nosotros estamos cuidando y protegiendo el corazón del planeta, Uruguay, pero lo vamos a hacer hasta que podamos. Es también su deber ayudar desde abajo a expandir conciencia, despertar conciencia. Una cosa, tienen que entender que es un segundo. Ahora estamos y en segundo ya no estamos. Es importante el aquí y el ahora. Aprendan en este momento y en cada momento de su vida el amor. Sientan cómo se sanan sus emociones y somaticen en su cuerpo físico la sanación. Sanen su columna, su espalda, sanen sus pulmones, sanen sus mentes, sanen su corazón, sanen su hígado, su páncreas, sanen su estómago, intestino, todo, vesícula. Vamos. Visualicen su cuerpo. Los queremos sanos. El amor trae amor, la salud trae salud, y la enfermedad trae enfermedad. Elijan la salud y el amor. Les estamos dando el poder de la elección. Elijan salud y amor. Los estamos iluminando. Les estamos dando luz y amor. Los estamos envolviendo. Expandan a su país, a todo el planeta. Les damos las gracias.
Nosotros también: - Gracias, gracias, gracias.
Canalizadora: Lilian Kellemberger.
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